Víctor Sánchez del Amo, tres equipos en seis meses

El nuevo entrenador del Betis fue despedido el Depor en junio y en agosto le liquidó el Olympiakos porque cayeron en la previa de la Champions League
15 de noviembre de 2016 Iñaki Cano - Sportyou
La vida de Víctor Sánchez del Amo ha sido un ir y venir constante con la maleta a cuestas. Una vez concluida su etapa en el Deportivo se marchó a Grecia dónde no llegó a debutar en la Liga con el Olympiacos y casi sin deshacer las maletas ha viajado hasta Sevilla para hacerse cargo del Real Betis Balompié. Un club volcánico pues desde el año 2000 ha tenido 17 entrenadores. “El Betis es un club gigantesco y no hay mejor sitio para hacer cosas importantes. En el fútbol puede ganar cualquiera y nosotros no vamos a ser menos”, ha comentado en su presentación el nuevo inquilino.
Víctor, que inició su carrera en los banquillos como ayudante de Michel, llega al Betis después de un casting en el que su ‘ex jefe’ también fue tanteado. La firma se produce después de que el presidente, Ángel Haro y el director deportivo, Miguel Torrecilla, negociaran con Michel, Manzano, Luis García… El nuevo entrenador se ha comprometido por lo que resta de temporada y si el Betis termina entre los diez primeros de la Liga renovará inmediatamente.
En el Betis los movimientos institucionales no dan tiempo a proyectos deportivos a largo plazo. En los últimos 16 años, sólo Pepe Mel pudo trabajar con ‘tranquilidad’ en su primera etapa. En la segunda le trajeron como ‘salvador’ y le despidieron como ‘culpable’. Desde la temporada 2013/14 en la que despidieron a Pepe Mel por primera vez, es decir en tres temporadas y unos meses de la actual, el banquillo del Villamarín es un constante volcán en erupción. Garrido, Calderón, Velázquez, Merino, Mel, de nuevo Merino y Poyet, han sido sus inquilinos y, al parecer, ninguno sirvió para los accionistas y aficionados del barrio de Heliópolis.
Víctor Sánchez del Amo debutará en Sevilla el viernes 18 de noviembre contra la UD Las Palmas. El segundo partido de la era bética de Víctor tampoco será cómodo porque deberán viajar a Ipurua. Valencia, Sevilla, Villarreal y Real Sociedad saben que no es fácil sacar algo del arsenal de los armeros. Luego enfrentará en la ida de los 1/16 de la Copa del Rey a su’Deportivo. Además de ganar partidos tendrá que pacificar la ´guerra´entre la afición, los jugadores y la directiva.
Los equipos de Víctor Sánchez del Amo suelen tener esquemas propios, pero también soluciones cuando el rival les impide jugar a su manera: “Buscamos ser competitivos y versátiles. Debemos saber adaptarnos con rapidez a las diferentes situaciones que nos generan los partidos. Por eso me gusta que no seamos previsibles». De los entrenadores que le dirigieron le dejó muy marcado Fabio Capello, de quien aprendió los motivos por los que se jugaba de una manera o de otra, aunque tuviera una base táctica casi innegociable: “Con él, teníamos autonomía y libertad para hacer lo más conveniente en cada instante del juego”.
Es consciente de que lo mejor no en todos los equipos es lo ideal: “Dependo mucho o todo, de los jugadores que haya en la plantilla. No todos pueden jugar como el Barça o como el Madrid porque no todos los equipos tienen a jugadores idóneos para hacer lo que hacen esos equipos. El primero que ha de adaptarse soy yo y por eso, trabajamos mucho en las reuniones donde les explicamos a los jugadores porque hacemos las cosas».
Para Víctor es innegociable su cuerpo de ayudantes. Desde que dejó de ser asistente de Míchel en el Getafe, Sevilla y Olympiacos, siempre ha llevado a su grupo: David Dóniga, segundo entrenador; Nacho Oria, preparador físico y Carlos Morales, analista y encargado de las labores de scouting. Las charlas previas a los partidos son de unos 15 minutos y durante los partidos, y desde lo más alto de los estadios, se graban diferentes situaciones que son transmitidas con la inmediatez. Sánchez del Amo y Dóniga cambian las variaciones tácticas que durante la semana ya habían previsto en determinadas situaciones y que los jugadores ya sabían que podían producirse.
En la presentación Víctor dejó claro sus lineas maestras del grupo: «No me gusta dar oportunidades y sí dárselas a los que las pidan sobre el césped. Que sepan que lo prioritario es el equipo y en el Betis todos deben entender que nadie es más importante nadie”. Reconoció que han comenzado por motivar a una plantilla que ha visto dispuesta a mejorar anímica y deportivamente: «He sido jugador y entrenador, he vivido situaciones complicadas y creo saber como solucionarlas con la colaboración de todos”.
La curiosidad del nuevo entrenador está en el presidente del Betis. Cuando Ángel Haro debutó en el palco verdiblanco, hace un año, quien le dio la bienvenida fue el Deportivo de Víctor, que ganó 1-2. En el fútbol, más veces que menos, todos los caminos conducen a Roma (Sevilla) y se cruzan. Víctor, antes de ser la esperanza del Betis, fue del Sevilla y por eso sabe lo que significaría para el aficionado y para él triunfar al final de la avenida de Las Palmeras.