Sergio Ramos, es historia y leyenda de España, pero ya…

En la primera convocatoria de Luis de la Fuente, son notables las ausencias de algunos jugadores que muchos ‘seleccionadores’ de España, ya está distribuyéndose por las redes sociales. Ya tenemos jaleo porque todos tenemos un entrenador en nuestro interior y por lo tanto, De La Fuente (irónicamente) no tiene ni idea ¿verdad?.

Alguno no iba a venir, pero en cualquier caso se les echa en falta como es el caso de David De Gea o el ‘defenestrado’ Sergio Ramos que según algunos, el nuevo seleccionador le dijo aquello de «hagas lo que hagas, no vendrás conmigo». No ha querido ampliar, confirmar o negar esas palabras privadas entre los dos que cada convocatoria volverá a ser actualidad. Por supuesto también piden a Pau Torres, a Jordi Alba, a Koke, a Canales o Marcos Llorente. Insisten en nombres como los de Borja Iglesias, Ferran Torres y se sorprenden por la ausencia también de Marco Asensio.

Por supuesto en la primera lista faltan algunos favoritos para los 47 millones de seleccionadores como Ansu Fati, Carlos Soler, Parejo o Sarabia y faltan jugadores que apuntan al futuro Gabri Veiga, Sancet, Brais Méndez o Riquelme y así podríamos seguir tres folios o más rellenando nombres de jugadores que nos gustan a muchos y que no convencen a Luis de la Fuente al que en el futuro le pesará Sergio Ramos como una losa o cómo a Luis Aragonés DEP hasta que ganó la Eurocopa, le pesó el nombre Raúl González Blanco.

Cada uno que pregunte lo que le dé la real gana. Qué cada cual piense lo que quiera de la polémica entre Luis de la Fuente y Sergio Ramos. Qué cada quién, juegue en el equipo de De La Fuente o de Sergio Ramos, pero algún día seguramente, sabremos los motivos deportivos y personales, por los que Sergio Ramos es historia y leyenda de la Selección española de fútbol y ahora busquemos una nueva estrella en el pecho y si es posible otra Eurocopa para el museo y dejemos a Sergio Ramos en paz o que él, deje a la Selección y al seleccionador, trabajar con tranquilidad sin misivas de despedidas que suenan más a rabieta que agradecimiento por defender un escudo que es de todos.