Rodrygo salva al Madrid de otro descalabro europeo contra el Inter

Victoria vital para el Real Madrid en Champions después de haberse dejado puntos en las dos jornadas anteriores. 3-2 contra el rival más duro del grupo para recuperar oxígeno en su misión de clasificarse a los octavos de esta Liga de Campeones.

Arrancó el partido con los dos equipos cautos, sin querer cometer errores comprometidos, pero con el atrevimiento necesario para generar peligro por parte de ambos conjuntos. De hecho, en los primeros diez minutos ya habían advertido el Real Madrid con Valverde y el Inter con un larguero de Barella y una ocasión de Lautaro.

Tras un breve respiro en el ecuador de la primera parte, metió una marcha más el equipo de Zidane que logró adelantarse por medio de Benzema. Un regalo interista en la construcción del juego, dejó solo al francés para que batiese a placer a Handanovic.

Poco después, Sergio Ramos amplió distancias en su clásica llegada al remate en un córner, pero Lautaro recortó la distancia en el marcador para poner el 2-1 en el marcador, que no se movió hasta el descanso. El argentino aprovechó una espectacular dejada de Barella de tacón para perforar la portería de Courtois.

Tras el descanso, los nerazzurri salieron con más energía que el Real Madrid, que, sabedores de las imprecisiones de sus rivales, quedaban a la espera de cualquier fallo para ampliar su ventaja.

Tras varios minutos en los que los de Zidane despreciaban la posesión para aprovechar la velocidad de Rodrygo y Vinícius, que entraron en la segunda parte, el Inter recibió el premio del empate.

En otra jugada en la que un central deja su posición, Lautaro fue el que asistió esta vez para que Perisic, con todo el tiempo del mundo, pusiese las tablas con un disparo cruzado al que no llegó Courtois.

Se pusieron las pilas los locales, ante un cuadro italiano que no se achicaba, y seguía con avisos muy serios de sus dos goleadores.

No obstante, terminó encontrando el premio Zidane con sus cambios, que protagonizaron el gol que le dio al Real Madrid la victoria. Un cruce desde la izquierda de Vinícius la recoge Rodrygo en el otro lado entrando desde la segunda línea para fusilar a Handanovic.

Poco más por parte de ambos conjuntos, con los locales cerrados, buscando las cosquillas del Inter a la contra; y los visitantes, a la desesperada colgando balones y con presión alta en la salida de balón rival.