Opinión
Permítanme que dude de algunas creencias
- 24 de enero
de 2020 -
- Iñaki Cano
No estoy ni a favor ni en contra de Diego Pablo Simeone y si acaso soy más de él que de otros del club rojiblanco porque él se ha ganado el derecho. Primero sudó la camiseta y ahora intenta que la valoren mucho más pero, de verdad, me es indiferente lo que hagan los dueños del Atlético de Madrid con el entrenador que cambió la historia rojiblanca. No le deseo a nadie, y al Cholo menos, que se ponga en la cola del paro. Pero una cosa es eso y otra no poder ni siquiera criticar al Cholo Simeone por ciertos aspectos de su ‘librito’ sin que se te tiren a la yugular como si no hubiera un ayer o el abismo sin él.
Sin negar la mayor, porque sería de bobos no reconocer todo lo bueno que ha hecho Diego Pablo Simeone, creo que deberá estar permitido no estar de acuerdo. Se podrá opinar y no comulgar con todo lo que hace él y estar en desacuerdo con los mandos que han confeccionado una plantilla con el beneplácito de Simeone sin necesidad de ser insultado por los ‘cholistas’ por remar contracorriente por el gusto futbolístico que ahora practica el Atlético de Madrid.
En el Atlético, como en cualquier otro club, lo importante es el escudo, aunque sea nuevo y no del gusto de todos, y no quiénes lo gobiernan desde el despacho o desde el césped. La historia de un club es mucho más grande que quién la cambia, si es que en realidad es así incluso en la entidad colchonera. El club que ahora pertenece a parte de la familia Gil y a parte de la familia Cerezo, entre otros, tiene un pasado con títulos y con jugadores que lo dieron todo por esos colores, que pertenecen a unos aficionados que sufren, lloran y gozan con el Atlético de Madrid desde mucho antes de que llegaran los actuales propietarios y el entrenador que ha abierto una era de éxitos.
Todo debería estar permitido, con el respeto que se merece Diego Pablo Simeone pero ahora ni los jugadores, ni los dueños ni el cuerpo técnico están dando con la tecla que les hizo crecer en estos tiempos modernos. Nadie debe olvidarse que antes de que Simeone entrenase al Atlético de Madrid y, como dicen sus enamorados, le cambiase la historia, el Atleti ya había ganado 9 Ligas, 9 Copas del Rey, 1 Supercopa de España, 1 Intercontinental, 1 Recopa, 1 Europa League, 1 Supercopa de Europa y 1 Intertoto además de tener, sin ganar, el corazón a rayas en rojo y blanco.
Por eso y por lo que me cuentan atléticos de pro con pasado, presente y futuro, quizás va siendo hora de jugar a otra cosa sin menospreciar al entrenador que le ha cambiado la historia al Atlético de Madrid y que no es otro que el Cholo Simeone. Diego Pablo es, además, el que da la cara y el que carga la mochila de la responsabilidad tapando a otros que llevan tiempo escudándose en él para no responsabilizarse de errores deportivos que saltan a la vista y más mirando por el retrovisor pero todo lo anterior no significa que quizás esta historia que fue bonita mientras duró, puede estar agotada o casi.