Víctor y Olympiacos, historia de una ruptura

El Olympiacos ha anunciado este martes la rescisión del contrato de Víctor Sánchez del Amo, dos meses después de su contratación. El motivo de tan abrupta ruptura es la eliminación del equipo en la Liga de Campeones antes incluso de llegar a la última fase previa. El club griego ha comunicado la decisión de forma escueta. Le da las «gracias y le desea los mayores éxitos en el futuro».

La aventura ha concluido de forma violenta especialmente para el presidente del campeón griego. Al día siguiente de caer eliminados de la Champions League frente al Hapoel Beer-Sheva, los ultras del Olympiacos irrumpieron en el entrenamiento y amenazaron a los jugadores. El incidente no pasó a mayores por la intervención de Víctor y el cuerpo técnico que pudo momentáneamente calmar a los violentos seguidores del Pireo.

A las dos horas de abandonar la ciudad deportiva, los ultras se trasladan a las oficinas de la empresa de Evangelos Marinakis para amenazarle y destrozar parte del mobiliario de oficina. Al presidente le acusan los ultras de invertir todo el dinero en el Nottingham Forest, del que también es propietario, y dejar a los del Pireo a la deriva.

Asustado por las amenazas, Marinakis ofrece a Víctor ser el nuevo manager general del club porque ni Juanjo Lorenzo, segundo director deportivo, ni Christian Karembeu, asesor del presidente, están de acuerdo con despedir al entrenador y hacen saber al presidente que no pueden dejarle escapar.

El técnico no acepta cambiar el banquillo por los despachos y finalmente llegan a un acuerdo para rescindir su contrato y el de sus ayudantes. Con Víctor, también se marchan Juanjo Lorenzo y Ioannis Vrentzos, hasta ahora director general del club.

Víctor Sánchez fue contratado tras la destitución de Marco Silva, al inicio de la pretemporada. El anterior técnico pidió refuerzos y no aceptó las órdenes del presidente. Antes de enfrentarse al Hapoel, Víctor ya advirtió a Karembeu y a François-Joseph Modesto, responsable de la dirección deportiva, de la necesidad de encontrar a un portero, un extremo y a un delantero para afrontar con garantías la fase previa de Champions. Por desgracia, los vaticinios de Víctor se cumplieron y el Olympiacos quedó eliminado y el entrenador, despedido. Víctor y su cuerpo técnico habían firmado por dos temporadas que no cobrarán completas. Marinakis les ha pagado al rescindir el contrato, la temporada actual completa. El segundo año del acuerdo, de momento no está previsto que lo perciban porque no se descarta por parte del propietario que terminen todos trabajando en el Nottingham Forest donde en principio iba a entrenar Víctor y su equipo de ayudantes.

Se trata del segundo despido de Víctor en pocos meses, ya que el Deportivo de La Coruña decidió prescindir de él para la temporada 2016/17, pese a tener un año de contrato por delante y haber cumplido el objetivo de la permanencia en Primera División.

La prensa griega ya especula con que Paulo Bento, manager general del club, podría hacerse cargo del equipo en su lugar.