Lamentable y vergonzoso enganchón entre Conte y Tuchel: ¡casi llegan a las manos!

El partido entre el Chelsea y el Tottenham de la Premier League, pasará a la historia porque estuvo más que caliente. No entrará en los recuerdos de los aficionados por el fútbol, ni por los cuatro goles y sí por culpa del mal comportamiento de los dos entrenadores, el alemán Tuchel y el italiano Conte. Los dos protagonizaron un lamentable incidente durante la segunda mitad del encuentro y tras la finalización del mismo que acabó empañando el derbi de Londres y con los dos entrenadores expulsados.

La mecha se encendió con el 1-1. El entrenador del Tottenham celebró con mucha efusividad el tanto de Holbjerg y se fue a la zona del Chelsea para festejar el tanto. Allí se encaró con Tuchel, que no se achantó y los dos se encararon hasta tal punto que casi llegan a las manos. Los técnicos tuvieron que ser separados y la cosa no quedó ahí de momento.

El alemán, Tuchel, quiso devolver la provocación con el 2-1 de Reece James. El jugador ‘blue’ marcó en el minuto 77 y el entrenador del Chelsea se fue corriendo por toda la banda y atravesando el área técnica del Tottenham al más puro estilo de José Mourinho.

Con la finalización del partido, los dos entrenadores volvieron a cruzarse, Antonio Conte le fue a dar la mano a Thomas Tuchel que la rechazó y el italiano le agarró de malas maneras. Dos personas tuvieron que lidiar entre Conte y Tuchel para volver a evitar que se enzarzaran de nuevo. El propio César Azpilicueta, que tuvo a Conte como entrenador en el Chelsea, se fue también a recriminarle la actitud y el árbitro solucionó el altercado con tarjeta roja para los dos.

El derbi de Londres no defraudó y la tángana de Thomas Tuchel y Antonio Conte acabó marcando el partidazo de esta jornada en la Premier League. Al final, reparto de puntos en un duelo no apto para cardiacos y un triste y vergonzoso espectáculo entre los dos entrenadores que tras darse el apretón de manos protocolario, Tuchel no soltó a Conte, lo que causó el enfado del italiano y esto originó que otra vez se encararan, pero esta vez llegando a las manos. Una pelea que terminó con el mismo resultado que la anterior.