Pogba decide un insípido Holanda – Francia

Francia se ha llevado los tres puntos del Amsterdam Arena, después de ganar 0-1 a Holanda. Una victoria importantísima, teniendo en cuenta que ambas selecciones son las favoritas para conseguir el único billete directo a Rusia 2018 en esta fase del proceso clasificatorio.

Francia, a pesar de que acabase llevándose los tres puntos y como ya vimos en el partido frente a Bulgaria, estuvo lejos de controlar el choque de forma regular. De nuevo Didier Deschamps tomó la decisión de apostar por ese 4-4-2 en el que Pogba y Matuidi -dos jugadores de mucho ida y vuelta pero en ningún caso organizadores- forman el doble pivote, con Sissoko en una banda, Payet en la otra, y Griezmann y Gameiro en la punta del ataque.

La diferencia con respecto al choque ante los búlgaros fue que la pareja de puntas del Atlético de Madrid no fue tan productiva, y eso, sumado al atasco en la circulación de balón, provocó que el equipo visitante no consiguiera producir un gran número de ocasiones. Enfrente, una selección holandesa con escasa experiencia y, en líneas generales, poca calidad, no era capaz de encontrar respuesta, lo que provocó que viésemos una primera parte bastante insípida.

Fue Paul Pogba el que rompería el tedio en colaboración con Stekelenburg. El centrocampista del Manchester United se aprovechó de una mala salida de balón del combinado oranje, condujo el balón desde la línea de tres cuartos y sacó un potente remate, que a pesar de describir un extraño iba muy centrado, por lo que puede hablarse de error del meta del Everton. Era el minuto 30 y más allá de ese remate y una acción de Gameiro en el arranque del partido, no hubo muchas más ocasiones.

En la segunda mitad, Holanda consiguió cambiar la dinámica del encuentro, aunque a pesar de la desventaja no llegó a poner en grandes apuros la meta defendida por Hugo Lloris. Danny Blind dio entrada a Bas Dost para acompañar a Vincent Janssen -dos tanques de área-, aunque no fue suficiente para igualar la contienda, y sólo un remate de Memphis en el minuto 88, después de una jugada alborotada en la que acabó sacando una gran mano Lloris, acercó al equipo local a rescatar un punto.