España se empeña en complicarse las medallas

La selección española de baloncesto sigue sin dar buenas sensaciones. Los defensores de la plata olímpica (el oro es de Estados Unidos, salvo hecatombe) se complican mucho el pase a la siguiente ronda, aunque tienen opciones aún, tras caer con la anfitriona Brasil por 65-63. Por delante les queda Nigeria (este jueves de madrugada), Lituania y Argentina, pero visto lo visto, ahora mismo los de Scariolo no son favoritos.

El conjunto español se ha malacostumbrado a los inicios difíciles de torneos, pero siempre conseguían remontar. El problema es que las sensaciones no son nada buenas, y el juego del equipo nacional depende demasiado de que Pau Gasol esté en forma. El ala-pívot de San Antonio Spurs fue, otra vez, el mejor del equipo, pero sus 13 puntos y 10 rebotes no fueron suficientes. De hecho, Brasil fue por delante del marcador siempre, hasta la mitad del último cuarto.

España sólo creyó en la victoria cuando entró un triple marca de la casa de Sergio Llull, que colocó a los españoles por delante. En un partido cuya diferencia máxima para los españoles fue de dos puntos, todo se decidió en dos fallos en los últimos instantes. Primero, Gasol erró desde la línea de personal, aunque lo arregló con un palmeo a Marquinhos que dio vida a los de rojo en el último instante. Lo justo para que Llull, primero, y Rudy, después, fallasen en el instante final.

Rudy Fernández fue uno de los representantes del equipo español que pidió a la afición que no les abandonasen, y aprovechó para mandar un recado a quienes le critican.

Ahora es el momento cuando algunos se bajan del tren, lo bueno es que la mayoría y nosotros seguimos en el, porque #TodosJuntosVamosALuchar

— Rudy Fernandez (@rudy5fernandez) 9 de agosto de 2016