España arranca con un empate sin goles con Egipto

España debutó en los Juegos Olímpicos de Tokio con un pobre empate contra Egipto en el torneo de fútbol, un resultado pobre dado que no hubo ni ocasiones de sobra ni fútbol vistoso.

No fue un inicio brillante, ni mucho menos. Sólo hubo una ocasión clara de España: un disparo de Dani Ceballos que fue al palo. Pero sobre todo, para palos los que dieron los jugadores egipcios. Prueba de ello fue que la primera parte acabó con dos lesionados: Óscar Mingueza, por un tirón muscular, y el propio Ceballos después de un pisotón de Taher Mohamed.

En la segunda mitad, aunque España se acercó más al área de Elshenawy, no llegó a haber peligro. De hecho, Egipto ganó metros e incluso sacó un córner en la recta final del encuentro que Unai Simón detuvo sin mayores problemas. La diferencia de calidad entre los dos equipos no se tradujo en nada, más allá de tres ocasiones: el palo de Ceballos, un cabezazo de Rafa Mir directo a las manos del portero y un balón de Vallejo que se fue al lateral.

A un pobre empate se completó con dos lesionados. Mingueza, al cuarto de hora, se echó mano al muslo después de una mala carrera y Ceballos recibió un pisotón que le obligó a salir del campo justo antes del descanso. Oyarzabal también se fue tocado, esta vez por un codazo del capitán egipcio, Hegazy, que repartió lo suyo.