Opinión
En el Gran Circo, Ferrari pone los payasos
- 04 de septiembre
de 2022 -
- David Sánchez de Castro
Lo ocurrido en Ferrari durante el GP de Países Bajos no es más que un síntoma de una enfermedad mayor. Son el caos personificado, un ‘meme’ andante. Ni los guionistas de ‘Modern Family’ o ‘The Office’ serían capaces de planificar el bochorno que, carrera a carrera, protagonizan los vestidos de rojo.
Mattia Binotto (o ‘Beanotto’ por obra y gracia de los montajes, busquen en twitter) tiene a su cargo a un ejército de mecánicos que no están ni a la altura del escudo que defienden, ni al reto que asumen. Es inconcebible que no hubiera una rueda preparada en los boxes cuando entró Carlos Sainz a hacer su primera parada, que ya de por sí era tardía. Pero esta vez no se puede culpar solo a Iñaki Rueda, el responsable de estrategia de la Scuderia, aunque tampoco sale indemne de este vodevil.
Carlos Sainz ha vuelto a ser la víctima y suficiente hace con morderse la lengua lo suficiente como para, sin hacerse sangre, dejar muy claro lo que opina. Decir que la primera parada en boxes “ha sido muy larga” es un eufemismo casi ofensivo.
🇳🇱 Carrera muy dura. Los reglajes no iban como esperaba y el toque con Lewis ha dañado el coche, así que faltaba ritmo. El 1er pitstop ha sido muy largo y luego penalización tras esquivar a un mecánico de McLaren. A por Monza.
–#CarlosSainz pic.twitter.com/gB8yxpx1aL
— Carlos Sainz (@Carlossainz55) September 4, 2022
Y ahora, a Monza, en Italia. Muy apropiado ir al hogar de los paggliacios.