Emocionante empate entre Vancouver Whitecaps y Colorado Rapids

Si algo tiene la MLS es que siempre genera emociones en los asistentes a los estadios y quienes llegaron al BC Place en Vancouver no pueden decir otra cosa. A pesar de que los Whitecaps no sacaron la victoria, los espectadores disfrutaron de un juego lleno de emociones y que la final dejó seis goles, […]
25 de septiembre de 2016 - Sportyou
Si algo tiene la MLS es que siempre genera emociones en los asistentes a los estadios y quienes llegaron al BC Place en Vancouver no pueden decir otra cosa. A pesar de que los Whitecaps no sacaron la victoria, los espectadores disfrutaron de un juego lleno de emociones y que la final dejó seis goles, luego del empate 3-3 de los de casa frente a Colorado Rapids.
Igualdad que mantiene las esperanzas de los canadienses de llegar a los playoffs y que acerca cada vez más a los de Colorado a la siguiente fase de la competencia norteamericana. Sin embargo, las expectativas eran grandes en la afición local que esperaban los tres puntos para menguar un poco las pálidas actuaciones del equipo.
La intención fue esa por parte de los Whitecaps, pero las cosas no comenzaron bien. Los Rapids se fueron en ventaja en el inicio del partido gracias a Dominique Badji, quien aprovechó un balón suelto tras una mala salida del arquero de casa. El gol dejó posicionado a Colorado que trató de manejar las acciones y terminó los primeros 45 minutos con la ventaja a su favor.
Pero la segunda parte fue una marea de emociones para ambos bandos que empezaría con el empate de Vancouver. Christian Bolaños centró un tiro de esquina que logró capitalizar Kendall Watson y así poner el 1-1.
Siete minutos después Shkelzen Gashi se encargó de poner la balanza en favor de Colorado, tras la ejecución de una pena máxima. Un desequilibrio que no duro mucho, pues Pedro Morales retornó la tranquilidad al BC Place tras conseguir el empate a dos.
Nuevamente Gashi se reportó en el marcador. El volante pidió el balón para ejecutar un tiro libre sobre los 74 minutos de juego. El cobro, de frente al arco de David Ousted, fue potente y con una acomodación increíble. Lo puso en un ángulo imposible y con efecto al mejor estilo de Roberto Carlos.
Con el 3-2 a favor de los de visita parecía terminar el encuentro. Pero en el la última acción Erik Hurtado se vistió de héroe al poner la igualdad final tras un golpe de cabeza que no pudo controlar Tim Howard.