Opinión
El Open cambia de favorito
- 20 de julio
de 2012 -
- Guillermo Salmerón
Que la piel del oso no se puede vender antes de cazarla está claro y eso lo sabía muy bien el estadounidense Brandt Snedeker cuando pasados 36 hoyos de uno de los torneos más difíciles del mundo, el Open Championship, se vio líder con un golpe de ventaja, con diez birdies y ningún bogey pasado el ecuador del torneo. Seguro que anoche el estadounidense, que salió con un lazo negro en su visera como señal de respeto por la tragedia del múltiple asesinato acaecido en Colorado, donde un loco asesinó a doce personas e hirió a 38 más en el estreno de la última entrega de Batman, no paró de darle vueltas a su cabeza sobre cómo tenía que jugar en el «moving day» (Día del movimiento) para mantener la ventaja y llegar al domingo como primer favorito a la victoria.
Sus sueños no debieron de ser muy buenos ya que este sábado el rubio estadounidense de ojos azules y camisa rosa no dio con las teclas que le llevaron al primer puesto ayer. En este tercer capítulo del torneo su tarjeta no ha podido resguardarse de los bogeys que han inundado su marcador firmando hasta seis que han tirado por la borda muchas de sus opciones -no todas- de conseguir su primer Major y su primer Open Championship acabando con 73 golpes (-7), a cuatro del nuevo líder del torneo.
Quien sí ha respondido en el Royal Lytham & St. Annes es ese casi clon de Tiger Woods. Se trata del australiano Adam Scott (-11), que además de tener un swing casi idéntico, ahora utiliza al caddie que el ex número uno del mundo tuvo durante casi diez años y con el que ganó sus catorce Majors, Steve Williams, además de haber contratado al entrenador con el que logró también buena parte de los éxitos, Butch Harmon. Con estos mimbres es fácil entender el éxito de este jugador y las ganas que todo su equipo tiene de que el ‘aussie’ gane un Major como este Open en donde Tiger sigue siendo favorito a pesar de estar a cinco golpes de la cabeza.
Tiger Woods, el actual número cuatro del mundo, terminó su tercera vuelta en Lytham sin usar el driver y pagándolo en su resultado (-6). Hoy terminó al par del campo después de firmar tres bogeys y tres birdies. Mucho tendrá que trabajar para intentar conseguir su décimo quinto Major y enjugar cinco golpes, algo que parece demasiado complicado hasta para un Woods que vive su segunda juventud en esta nueva etapa tras los problemas que tuvo hace ya casi dos años.
Al carro de los posibles favoritos se han unido tras esta tercera jornada el norirlandés Graeme McDowell, que con una vuelta de tres bajo par se ha situado segundo empatado con Snedeker (-7) a cuatro de Scott. Con el que todavía hay que contar es con el también estadounidense Zach Johnson y con el sudafricano Ernie Els, ambos ganadores de torneos del Grand Slam y que con (-5) todavía pueden dar una sorpresa.
Quienes no la darán seguro serán los cuatro españoles que todavía están en juego y a los que sólo les queda el papel de poder mejorar posiciones en la clasificación general del torneo. Tras esta tercera jornada, el mejor de los nuestros sigue siendo Miguel Ángel Jiménez, cuadragésimo tercero, con una vuelta de 73 golpes y (+3); con (+4). Pablo Larrazábal y Gonzalo Fernández Castaño empatan en la quincuagésima cuarta plaza mientras que el canario Rafa Cabrera Bello es septuagésimo sexto, con (+7) después de una mala ronda de 76 golpes.
Entre los grandes favoritos que no tendrán opciones mañana de ocupar plazas de honor en este torneo que cumplirá 33 años desde la primera victoria de Seve Ballesteros en este mismo campo estarán hombres como Rory McIlroy (+5), Lee Westwood (+4), Ian Poulter (+3), Padraig Harrington y Francesco Molinari (+2).