Capello empieza su andadura en China con el pie izquierdo

Después de los indiscutibles éxitos que Fabio Capello ha logrado en los banquillos -AC Milan, Real Madrid o Roma como grandes ejemplos- los últimos proyectos del técnico italiano se están viendo condenados al fracaso. Sus etapas como seleccionador en Inglaterra y Rusia no cumplieron en absoluto con las expectativas, y a pesar de que su salida del combinado exsoviético invitaba a pensar que su carrera estaba concluida, la suculenta oferta recibida del fútbol chino le hizo cambiar de opinión.

El destino elegido es un arma de doble filo. Jiangsu Suning es uno de los equipos más poderosos desde el punto de vista económico del fútbol asiático -la cadena de electrodomésticos Suning cuenta con un potencial importante, hasta el punto de haberse hecho con la mayoría de las acciones del Inter de Milán-, y en los últimos años se había asentado de forma indiscutible en la élite del fútbol chino.

El coreano Choi Yong-Soo había hecho un enorme trabajo en su banquillo -ha sido considerado en los últimos tiempos uno de los mejores en su rol de toda Asia- y los fichajes de jugadores con cartel en Europa como Ramires o Alex Teixeira, además de la llegada del prometedor delantero colombiano Roger Martínez, confirmaban al equipo como uno de los grandes gigantes del país.

Los títulos de Copa en 2014 y 2016 o los subcampeonatos ligueros de 2012 y 2016 dejaban claro que la salud del proyecto era realmente buena, pero todo se ha truncado en el arranque del curso 2017. El equipo se encuentra en este momento en puestos de descenso, y a pesar de que la calidad de la plantilla y el hecho de que quede toda la segunda vuelta son motivos para la esperanza, Capello se ha encontrado con una situación delicada.

Nada más llegar, Fabio ha tratado de apuntalar su zaga -está jugando con un 5-3-2 en el que Ramires ha perdido vuelo para barrer acciones por delante de la defensa-, y a pesar de que el equipo se ha mostrado sólido en esa fase del juego, ha perdido dos encuentros (por 1-0) y ha empatado otro (0-0). La falta de mordiente en ataque puede solucionarse con el regreso de Roger Martínez, que está lesionado, pero no cabe duda de que la dinámica debe revertirse ya para no sufrir un doloroso e inesperado descenso.