Adiós ‘O Pai’, consíguenos un poco de dinero más

Cantaban los Ronaldos aquello de «adiós papá, adiós papá; consíguenos un poco de dinero más». Ni eran brasileños aunque por la canción podrían serlo, ni seguramente tenían como progenitor a Neymar Pai, el famoso padre del jugador brasileño que ha movido a su hijo a su antojo y le ha llevado del Santos al Barça y del club azulgrana al París Saint Germain usando la misma fórmula. El mayor de los Neymar casi chantajeó a la directiva de Sandro Rosell para acabar cobrando una prima de traspaso de casi 40 millones -este asunto todavía suscita grandes dudas-, y ahora ha hecho lo propio. Decía él mismo a su salida hacía París que había respetado la voluntad de su hijo pero eso ya no se lo cree nadie; ‘O Pai’ es seguramente el peor asesor para un jugador que ha cambiado el fútbol por el verde, o lila, de los billetes.

Con la mentira por bandera, Neymar senior sería capaz de mentirle a su médico. Durante todo este tiempo y desde que el compañero de As y Atresmedia Ignacio Miguélez anunció que el jugador había decidido irse; el entorno del brasileño ha estado engañando constantemente a la prensa y, con la ley del silencio por bandera, ha escurrido el bulto hasta prácticamente el último momento. El propio progenitor le comunicó a la tripulación del jet privado que le llevaba a Oporto que su viaje era hacia Londres. También hizo lo propio con la compañera Helena Condis, a la que mintió sin ningún tipo de escrúpulo; dejando claro que lo suyo es el dinero y que para conseguir su cometido es capaz de cualquier cosa.

Por en medio también esta Neymar, el junior, el que hace que su padre sea millonario, el que dijo que era su decisión y no la de su entorno como todos sabemos. El jugador, mal asesorado y impulsado por el precio del dinero -que no del poder-, cambió a Leo Messi y Luis Suárez por Edison Cavani y Javier Pastore. Dice que no le movió ni el querer ser la primera espada en un equipo de élite ni el olor de los fajos de los billetes pero lo cierto es que el que más pierde es él. Neymar no será el mejor del mundo mientras Messi juegue pero una cosa está clara, si es difícil ganar el Balón de Oro al lado del argentino, lejos de él lo será todavía más.

El brasileño se equivoca, ‘O filho do craque’ -algo que nunca entenderé-, se ha dejado asesorar por su padre y a éste solo le mueve el dinero; el mismo que de aquí tres o cuatro años le llevará al Real Madrid. Tiempo al tiempo.